Después de revisar las propuestas, se unieron las más interesantes y de estas salió una nueva idea que reúne las tradiciones y orígenes del festival. La playa, como sitio escogido, se convierte en un escenario en el cual el recorrido llega a su final, allí se retoman los cuentos originales acerca de saltar el fuego y para esto se excavan en la arena 7 curvas en torno a una hoguera gigante para que las personas participantes las salte. Al mismo tiempo una gran pantalla hecha de materiales reciclados proyecta sombras de personas bailando al ritmo de la música y el fuego, representando toda la cultura que gira en torno a esta fiesta.

Como el principal objetivo es reunir a las personas y revivir la fiesta, este concepto logra darle un giro a la fiesta combinando el festival  con la historia inicial, es decir la cultura se revive por medio de un buen diseño, que al mismo tiempo cuida el medio ambiente y respeta las tradiciones.